- En un pub o discoteca.
Es importante contar con buenos camareros detrás de la barra. Está claro que en un sitio de éstos prima la imagen. Hasta ahí llegamos. Pero muchas veces se confunde la imagen con el beneficio que te dá esa imagen, y eso en la mayoría de los casos no funciona. Me explicaré mejor. En muchas ocasiones, y últimamente es lo que más se lleva, los empresarios optan por poner una cara bonita detrás de la barra para que trabaje como camarer@.
En el caso de los chicos, que sean musculosos, que vistan "modernillo", que tengan labia con las chicas...En el caso de ellas, que tengan "buenas tetas" (si, cuanto más grande mejor), que enseñen bien el escote, que aguanten taconazos, que enseñen medio culo y que encima tonteen con los tíos. Ésto puede parecer demasiado machista, feminista, o como lo querais llamar, pero la realidad es así. Muchos empresarios buscan agencias de modelos para contratar a modelos para poner copas. Estoy de acuerdo de que una imagen vale más que mil palabras, pero después de tantos años trabajando en una barra, quizás ésta opción no sea la más oportuna para el negocio desde el punto de vista de la rentabilidad. Porque quizás mientras que un camarero/a está más pendiente de enseñar su cuerpo, otro que trabaje a su lado te pone 10 copas y realmente te da los beneficios.
Siempre se puede encontrar un camarero majo, agradable, que aunque no sea un sex-symbol, sacará más partido y ganará más beneficio para el bar. Yo voy a un pub a tomarme una copa y a pasar un rato agradable. Evidentemente si me puedo alegrar la vista, pues mejor, pero prefiero la eficiencia del camarero que me sirve la copa (en el caso de que yo sea la cliente), o tener a un compañero con el que el trabajo de una noche sea llevadero (en el caso de que sea mi compañero), a tener que esperar 15 minutos para que una modelo o un "machote" de gimnasio me tarde en poner una copa porque no tiene ni puñetera idea de lo que le han pedido. Ahí quedo esa reflexión.
- En un restaurante, tapería, sitio de comidas.
Evidentemente no es lo mismo un restaurante de 3 tenedores que el chiringuito de la playa. No se puede comparar a El Bulli con el chiringuito del "Tio Paco" de la playa. Pero quizás para un sitio de comidas, ya sea de una categoría u otra, la organización de todas las parcelas (barra, cocina, terraza) del establecimiento, adquieran mayor importancia, pues si uno no funciona, arrastra a otro y todo se va al garete.
El primer apartado, la cocina. Importante que sea de calidad. Puedes tener la mejor cocina del mundo, pero si no es coordinada y rápida, adiós negocio. Es importante la presentación de platos, la calidad de la comida, la calidad del cocinero a la hora de cocinar y la rapidez con que se trabaja o la organización a la hora de trabajar, pues si sacas los platos a destiempo o tarde, la cocina pierde la esencia. Hace poco, he ido a comer a un sitio nuevo, que tenía buena comida, buenas tapas, pero tardaron en sacarme 3 raciones en 1 hora. Eso acaba sacando de quicio al cliente y puede costar que el cliente no repita. Hay que se ágil.El segundo apartado en un restaurante o tapa es la barra. El enlace entre el cliente y la cocina, el enlace entre el salón, el restaurante, la terraza y la cocina. Hay que estar atento a todo en un mínimo espacio de tiempo. Al igual que la cocina, hay que se ágil, pero a la vez ordenado, pues si la comunicación entre la terraza y la cocina se rompe por éste sitio, adiós todo. Hay que tener las cosas muy claras y saber dónde se está en cada momento.
El camarero de sala. Quizás es que más palo se lleve de todo el grupo humano. Pues es el que da la cara si algo de cocina no sale bien, es el que tiene que repartir los pedidos y repartirlos en su justa medida de tiempo. También es verdad que si un camarero en éste apartado es malo, se pierde, no tiene control y no tiene organización puede dar al traste con el trabajo de cocina y da al traste con el trabajo de barra, provocando que se tengan que repetir los pasos dos veces.. Las cosas como son.El camarero de sala también tiene que tener un puntito de improvisación. Pues si la cocina se retrasa, tiene que darle un poco de labia al cliente, mediante algun recurso, como un aperitivo de cortesía, para que el cliente se entretenga y el tiempo de espera no se haga eterno. Tiene que saber medir los tiempos de cocina, saber cuando servir el entrante, medir el tiempo para servir el segundo, tener la mesa preparada, tener clara la organización del salón, y sobre todo no ponerse nervioso, pues cuando uno se pone nervioso da sensación de intranquilidad e inseguridad al cliente y éste puede que no vuelva a pisar el establecimiento.
Está claro que todo debe funcionar a la perfección como una máquina de relojería, tres apartados importantes en un negocio hostelero dedicado a las comidas. Hay que ser eficaz. Hay que echarle huevos.
No hay que engañar al cliente. No se debe cobrar algo que no te han pedido, y si es cortesía, pues eso, que sea cortesía por parte del restaurante, pues no hace mucho que fui a un restaurante que se supone que tiene gran categoría y éste detalle, el de cobrar una tapa de cortesía en la cuenta, ha provocado que, desde mi persona no vuelva a plantearme volver, y por supuesto, la publicidad tampoco será la idonea.
Saludos a todos...volveré.




